jueves, 8 de octubre de 2015


No,
no sé qué es lo que hay al otro lado de la pared
No,
no entiendo lo que dice la letra de esa canción
No,
no puedo ver los cambios de tu mirada
No,
no he aprendido a mirar a los ojos mientras me hablan
No,
no distingo los colores de esas voces
No…
no puedo pensar en nada mientras me estoy cortando el alma.

Los Extraños

Me han vuelto a visitar
llegaron de madrugada y se fueron antes del amanecer
entraron furtivamente
me sacaron el aire
me quitaron el tiempo
me dejaron en silencio.

Que cruel es ver mientras duermes
pensar mientras sueñas
gritar de forma sorda
y arañar la oscuridad.
Que cruel es ser atrapado desde el interior
ser apretado, estrujado
consumido por el vacio.

Solo mi sangre me mantuvo a flote
sujeto mi mano y me trajo desde adentro
solo mi dolor me hizo volver en si.
El filo de mi boca los arranco de mi garganta.
¡Largo!
Esta noche no me dejare.

Todo es mierda.

Me levanto a las 5
apago la alarma
me baño
escupo sangre
me pongo el disfraz
mastico mi desayuno
camino hacia la parada del autobús
me torturo los oídos todo el camino
llego al trabajo
saludo por cortesía
atiendo clientes
me rio de los chistes de mi jefe
ignoro a mis compañeros
atiendo clientes
recibo mordidas
me lamen la cara
voy a almorzar
veo pornografía después del almuerzo
me escondo entre los estantes
atiendo clientes
me quedo callado mientras finjo poner atención
saludo
REPITO
LAS
MISMAS
PALABRAS
ya tengo un dialogo hecho
atiendo clientes
les doy la razón para no pelear
me despido
regreso a casa
veo por la ventana
esta oscuro
casi me caigo
me reciben mis perros
cierro la puerta
como mi cena desde el suelo
me encierro desde adentro
escribo en la pared
subo el volumen de la música
escribo en mis brazos
subo el volumen de la música
escribo atravesando el papel…

Y al final,
todo para continuar con este interminable ciclo
de tortura y compromiso.

martes, 22 de septiembre de 2015

Dormiré contigo esta noche

Hoy te he preparado la cena
y corte unas palabras muy bonitas para adornar la mesa.
Por favor, siéntate
esta noche estoy para ti
y la lluvia que cae
es la canción que busque para nuestra velada.

Quiero oírte hablar por horas
cuéntame en detalle tus aventuras de hoy
y ve a través de mis ojos
la emoción que siento al escucharte.

¿Ya estas cansada?
Permíteme llevarte a tu alcoba
déjame cargar tus tristezas
arropar tus preocupaciones
yo te seguiré escuchando
te acompañaré en sueños.
No te preocupes,
no huiré en la madrugada
no saldré a escondidas por la ventana
te prometo que al amanecer
aun seguiré tomando tu mano.

miércoles, 13 de mayo de 2015

Reencuentro

Esta mañana recibí tu visita
y a pesar de haberme atormentado
fue placentero ver nuevamente tus ojos.

Un silencio enorme nos saludo
nos acompaño un momento
dejando que nos pusiéramos al día,
miles de palabras quedaron atoradas en mi garganta
y un mar de lagrimas se seco en mis ojos.

Tu mirada me atravesó la piel
y quede desnudo,
esperando una palabra
tratando de entender tu voz
de comprender,
porque había pasado tanto tiempo
y ahora estabas aquí.
¿Qué es lo que quieres?

lunes, 20 de abril de 2015

Revolver

Y ahí va,
otro de mis sueños
estallado por la pólvora de tu indiferencia,
mi corazón sale disparado
atravesando todos los cristales,
ha ido a parar
a la pétrea comisura de tus labios.
Mi sangre baña tus dientes.

Y esa eres tú,
alimentándote de sueños y pesadillas.

miércoles, 1 de abril de 2015

¿Por qué?

¿por qué razón sigo dedicándote mi tiempo?
¿por qué mis sueños todavía son tuyos?
¿por qué mis letras aún te describen?
¿Por qué mi cuarto tiene tu aroma?
¿por qué sigo esperando verte al otro lado de la calle?
¿Por qué?
¿Por qué, siento todavía tu ausencia?

Por la ventana

Verte esa tarde no fue fácil,
ver tu sonrisa
tus ojos
tu cabello.

Ver tus labios e imaginarme tu voz
recordar cómo se sentían tus palabras en mi oído,
tus dedos en mi rostro,
tu aliento atravesándome la piel.

No sabes,
lo verdaderamente difícil que fue verte
la eternidad de esos segundos
la erupción que provocaste en mi pecho,
el frío que recorrió mis dedos.

¡Te extraño!
Fue lo único que pude decir entre dientes,
pero ya hace mucho tiempo
que dejaste de escuchar mi voz.

domingo, 22 de marzo de 2015

A través de mis ojos.

¿Y si nos tomamos de las manos
y nos vamos de acá?
atravesemos el estanque
y pasemos la noche bailando,
yo podría escuchar tu voz eternamente
mientras acaricio tu sonrisa con mis labios.

Sé que no soy un caballero en su blanca armadura
pero en estos días,
¿quién lo es?
¿quién se atreve a amar sin mesura?
¿quién se atreve a abandonar todo por un ser?
¿quién se atreve a cerrar sus ojos y guiarse solo por sus sentimientos?

Si pudieras verte a través de mis ojos
comprenderías lo que significas para mí.

jueves, 12 de marzo de 2015

La manera más sincera de amar.

Cuando muestras tus sentimientos
esperas ciegamente ser correspondido
esperas estar en los sueños de alguien
y ser el reflejo en sus ojos.

Cuando entregas el corazón,
esperas inocentemente que no sea estrujado
que sea aceptado con primor
y conservado con recelo.

Esperas no decepcionar
no herir,
no provocar lagrimas
mientras te conservas a ti mismo
y tratas de mantener
tus sentimientos puros
llenos de devoción,
alejados de cualquier vicio.

Todo amor es verdadero
y un amor no correspondido
es la manera más sincera de amar.

lunes, 9 de febrero de 2015

Duda

Te veo al otro lado de la calle
inmóvil,
sonriente,
perdida
¿me atreveré a cruzar para llegar hasta ti?
¿me atreveré a enfrentarme
a una avalancha de desconocidos
solo para tomarte entre mis brazos?
No lo se…
en este momento
mis sentimientos danzan a mi alrededor,
parecen locas mariposas
buscando el contacto de una superficie húmeda.
Hay millones de palabras
queriendo salir de mi garganta
pero mis labios están sellados
a penas logro levantar la mano
para decirte adiós.

viernes, 30 de enero de 2015

Eso que llaman amor

El estado de mi ausencia
se debe a recuerdos vagos,
viciosos,
imágenes borrosas y absurdas
de una época en la que pensé que era feliz.

Me reía mucho
soñaba mucho
me atreví a sentir con una pasión y entrega
completamente obsesivas
totalmente ajenas a mi voluntad.

Me deje poseer por eso que llaman amor
eso,
que te desnuda,
te desmorona
y te hace estallar y reconstruirte en un suspiro
ese sentimiento amargo
tan placentero
tan ruin
tan falto de lógica
y aun así…
tan lleno de vida.

Recuerdo

Aun recuerdo el tacto de tus besos
acariciando los miedos de mi infancia,
aun recuerdo el olor de tu cabello
embriagando todos mis sentidos,
aun recuerdo esa sonrisa en tu rostro
inspirándome…
aun recuerdo tu voz,
y todo eso me da asco.

martes, 27 de enero de 2015

Hola

Me levante tarde esa mañana, bueno, fue el chillar de mis tripas lo que me obligo a levantarme, la sensación de hambre ya se había hecho insoportable, obligándome a salir de la cama.  Me levante, me puse un short y la primera camiseta que encontré, fui al baño, me enjuague los dientes, mire la hora en mi celular: 8:12 am. –Los perros no han comido- , eso fue lo primero que pensé.
                Revise rápido la refrigeradora en busca de unas sobras que poder darles, calenté un poco y llene sus platos, comieron muy ávidamente. Agarre las llaves de la casa, saque la bicicleta y salí a la calle rumbo a la panadería. Es muy aburrido desayunar sin pan, además, desde pequeño desayuno con pan, supongo que sigo haciéndolo porque me acostumbre a comer pan en las mañanas con el desayuno, así que siento raro cuando no como pan por las mañanas.
                A pesar de que el sol ya calentaba, se sentía muy helado, me frote fuerte los brazos antes de subirme a la bicicleta, salude a la señora que vive enfrente – casi 5 años de vivir acá y aún no se su nombre- y comencé a andar. No iba con mucha prisa, a pesar del hambre, me tome mi tiempo para llegar a la  panadería, es porque me gusta mucho andar en bicicleta, así que no me apresure. Atravesé el mercado, había mucha gente, tuve que esquivar muchas carretas y canastos y estuve a punto de levantarme a dos señoras… siempre he sido muy torpe con la bicicleta, y la mayoría de las personas suelen ser muy distraídas cuando van caminando en la calle.
                Salí de la calle del mercado, y cruce en el polvoriento camino de tierra que inicia al costado de la iglesia, alcancé a escuchar algo de ruido desde adentro del templo, supongo que había misa o alguna mierda por el estilo. Justo antes de llegar a la panadería, esta la casa de Lyn… es tan linda, siempre que paso frente ahí, lo hago lo más despacio que puedo, con  la esperanza de verla aunque sea por unos segundos, ya sea a través de las ventanas o saliendo o entrando a su casa. Pero esta vez no tuve suerte.
                Llegue a la panadería, salude al entrar, como hago siempre que entro a un lugar. Allí estaban Marco y Ramón, en su acostumbrado ejercicio de insultarse mutuamente, hasta que alguien dijera algo lo suficientemente ofensivo o gracioso, que alguno de los dos no pudiera responder, ya sea por la risa o el enojo que les causara.
-          Que ondas cabrón-
Era la forma usual en la que me saludaban.
-al suave-
- que tarde venís hoy-
- sí, me acabo de levantar-
- se nota… jajajajajajaja –
- ¡no me jodas! Dame dos coras de pan mejor-

Me despacharon el pan, ya esa hora ya no estaba calientito como recién salido del horno, ya estaba helado, pero igual, me gustaba. Cogí el vuelto, me lo metí a la bolsa y me di la vuelta hacia la salida. Y ahí estaba, quede justo cara a cara de Lyn, quede tan cerca de su rostro que hasta pude sentir su respiración. Ella se me quedo viendo por una fracción de segundo, me sonrío y sus labios pronunciaron un débil – hola- .
                 No fue un gran saludo, solamente un “hola”, se sintió un poco emotivo, como con algo de alegría , como cuando te dirigís a un amigo – o al menos yo así lo sentí – y se quedo ahí, como por dos segundos, mirándome fijamente mientras yo solo me quedaba parado y sin decir nada. Al final siguió caminando hacia el despacho, a comprar pan. Yo seguí ahí parado, respirando de forma nerviosa hasta que caí en cuenta que había dejado ir la oportunidad de devolverle el saludo, e inclusive, compartirle una sonrisa. Trate de volverme hacia ella, contestar el saludo… pero mi momento ya había pasado, ya se había ido, perdí mi oportunidad.
                ¡Rayos!, solo vino a mi mente la canción de la muda:

“no le dijo
No le dijo
No le dijo nada,
Nunca dijo
Nunca dijo

Nunca dijo nada. 

domingo, 25 de enero de 2015

Esa Tarde.

Me estremezco mucho al pensar
en los inmensos días de hastío
en las veces en las que inhalaba profundo
y trataba de aguantar la respiración
hasta que sentía mis dedos entumecerse
y lloraba…
más no de tristeza.

Contaba carros
contaba personas
contaba las piedras que encontraba en el piso
y arrastraba mis pies pesadamente en el suelo
con la esperanza de desenterrar algo que me produjera placer.

No esperaba gran cosa
nada brillante,
grande

o raro, con encontrar un centavo me hubiera bastado.